10 datos curiosos e interesantes de la radio

0
Un niño descubre que el radio de Al Capone debería ser igual a este y no como el que mostraba un museo

La semana pasada, cuando hablaba de por qué las emisoras de radio se identifican con letras, mencioné el caso del Titanic, el legendario trasatlántico que se hundió en el mar al chocar con un iceberg el 15 de abril de 1912.

En ese artículo mencionaba que hasta ese momento no era obligatorio contar con equipos de radio para asegurarse de que siempre contaran con una herramienta de comunicaciones y con personal atento las 24 horas del día en caso de emergencias.

El Titanic no solo era el buque más grande construido hasta ese momento -por eso se le llamó así, el “titánico”- sino que estaba equipado con lo último en tecnología, incluyendo el recién inventado telégrafo, que estaba siendo operado por la empresa Marconi. Durante el hundimiento, usaron la radio para llamar a un barco cercano y rescatar así a los pasajeros.

Gracias a este hecho, muchos otros barcos comenzaron a instalar equipos de telégrafo, pero en ese momento se identificaban únicamente con sus nombres, que muchas veces eran difíciles de entender por la forma como se escribían o simplemente porque estaban en otros idiomas.

De allí surgió la necesidad de crear una especie de lenguaje universal que sirviera para identificar no solo los nombres de las naves sino su procedencia, por lo que, tal como lo cuento en ese artículo, se creó el sistema de letras de identificación.

Como esta, hay muchas pequeñas historias curiosas e insólitas que han ayudado a formar la radio de hoy y todos sus derivados digitales, y por eso he querido presentar algunas de ellas en este artículo, que complementa otras publicadas en radioNOTAS anteriormente.

Aquí están esos 10 datos curiosos e interesantes de la radio

1. Un niño de trece años descubre el error de un radio en un museo.

El joven Joey Warchal, que colecciona radios antiguos, visitó la Penitenciaría Estatal del Este en Filadelfia y notó que en la celda donde encerraron a Al Capone había un radio que supuestamente había usado el mafioso, que estuvo encarcelado allí en 1929 y 1930.

El muchacho, que apenas cursaba séptimo grado, se dio cuenta de que el radio exhibido había sido fabricado en 1942, años después del encarcelamiento de Capone.

El radio, al fondo de la celda, no era igaul al de Al Capone.

Entonces compró en internet, por su cuenta, un radio Philco Lowboy 64 de 1929 que le costó 300 dólares y lo donó al museo. Era similar al de la foto que adorna este artículo.

Al final, el adolescente recibió el radio que estaba exhibido como muestra de agradecimiento por parte de la Eastern State, prisión que cerró en 1971 y ahora funciona como museo y monumento histórico nacional.

2. Las primeras transmisiones públicas de radio se realizaron en la torre Eiffel por científicos de radio.

Lee de Forest, junto con sus compañeros, es visto como el padre de la radiodifusión. Aprovechando que fue a pasar su luna de miel a París en 1908, se tomó un descanso y subió al monumento más famoso de Francia.

Desde allí transmitió una selección de música a los suburbios parisinos y se convirtió en el primer DJ de radio. También emitió el primer boletín de noticias de radio, convirtiéndose en un verdadero pionero.

Lee de Forest y sus transmisiones de radio.

7 años más tarde, en 1915, De Forest realizó una sesión de comunicaciones de radio entre la ciudad estadounidense de Arlington, Virginia, y París, ubicando un receptor en la punta de la torre Eiffel para recibir la señal.

3. La radio salvó a la Torre Eiffel de ser demolida

La torre fue construida como una puerta de entrada para la Exposición Universal, una feria mundial que marcó la celebración del centenario de la Revolución Francesa. Su inauguración se dio el 31 de marzo de 1889 y se abrió al público el 6 de mayo de ese mismo año.

A Eiffel solo se le dio permiso para que su torre estuviera en pie durante 20 años y debía ser desmantelada en 1909, cuando su propiedad volvería a la ciudad de París. Durante ese tiempo, y gracias a esa concesión, se quedaría con todos los ingresos económicos recibidos por los visitantes.

Su construcción encontró gran resistencia por parte de los habitantes de París porque les parecía horriblemente fea y monstruosa. También les sorprendió su forma atrevida, cuestionando a Gustave Eiffel como ingeniero.

Torre Eiffel en plena construcción, agosto de 1888.

La ciudad había planeado derribarla (parte de las reglas originales del concurso para diseñar una torre era que debería ser fácil de desmantelar), pero como la torre demostró ser valiosa para la radiotelegrafía, se permitió que permaneciera después de la expiración del plazo.

Eiffel, que era ingeniero civil, se hizo famoso por la construcción de varios puentes para la red ferroviaria francesa y por su contribución a la construcción de la Estatua de la Libertad en Nueva York.

Tras su retiro de la ingeniería, se centró en la investigación de la meteorología y la aerodinámica, realizando importantes contribuciones en ambos campos. Por ello usó su apartamento en la parte superior de la torre para llevar a cabo observaciones meteorológicas y realizar experimentos sobre la acción de la resistencia del aire sobre los cuerpos que caen.

Apartamento de Gustave Eiffel en su torre
(Foto: Condé Nast Traveler)

Gracias a sus experimentos, pero sobre todo al valor estratégico al ser utilizada por los militares para interceptar transmisiones militares cruciales durante la Primera Guerra Mundial, finalmente la torre se salvó de ser desmantelada y continúa siendo uno de los monumentos más famosos y visitados del mundo.

4. Gracias a la radio hay música en los contestadores telefónicos

Mientras uno espera a que lo pasen a la extensión adecuada cuando se hace una llamada telefónica, es muy posible que lo pongan a escuchar alguna música de fondo. Esta idea, que ha ido desapareciendo poco a poco gracias a los nuevos sistemas digitales, surgió por casualidad.

Alfred Levy es un inventor y empresario estadounidense. En 1962 descubrió un problema con las líneas telefónicas de su fábrica: un cable suelto estaba tocando una viga metálica del edificio. Esto convirtió al edificio en un receptor gigante de radio.

De esta forma, la señal de transmisión de audio de una emisora de radio que tenía sus estudios en un edificio vecino comenzó a ser captada por el cable suelto y su señal podía ser escuchada cuando las llamadas telefónicas entrantes se ponían en espera.

Levy patentó su trabajo en 1966. Si bien han llegado otros avances para cambiar y mejorar la tecnología, fue esta creación la que inició la evolución de la música de espera que se usa en la actualidad.

5. Cada año, las antenas de radio matan a un número considerable de pájaros.

A ese fenómeno, que en inglés se le conoce como ‘Towerkill’ (Asesinato de torre) es un fenómeno en el que las aves mueren por colisiones con las torres de las antenas.

En condiciones de poca visibilidad, a las aves les cuesta volar entre los cables de sujeción, conocidos como ‘vientos’ en el argot de la radio. Pero las luces nocturnas alrededor de las torres también pueden interrumpir los patrones de migración, con pájaros desorientados que chocan con la estructura.

Las torres de las antenas de radio son un peligro para las aves.

En los Estados Unidos, el Servicio de Pesca y Vida Silvestre de EE. UU. estima que entre 4 y 50 millones de aves mueren cada año a causa de esta situación. Es obvio que el fenómeno es de considerable preocupación para los ornitólogos, porque muchas especies de aves en peligro de extinción están siendo asesinadas y porque muchas aves mueren en un área de tierra tan pequeña.

Además, las luces de las torres interrumpen los patrones de migración de las aves de maneras que aún no se comprenden por completo. Al menos 231 especies se han visto afectadas, y los migrantes neotropicales constituyen una gran proporción de todas las especies muertas.

Sin embargo, investigaciones indican que, si en lugar de una luz roja estática se cambia por una luz intermitente, se puede reducir el número de muertes hasta en un setenta por ciento sin disminuir la visibilidad para las aeronaves.

6. El creador de la RCA luchó muy duro para evitar que la radio FM tuviera éxito.

David Sarnoff fue un personaje muy controvertido. Le encantaba que alabaran sus ideas y proyectos y recompensaba con gusto la lealtad, apoyando a sus ingenieros sin reservas. Rara vez levantaba la voz o se le veía descompuesto en público.

Pero oponerse a David Sarnoff dentro de los pasillos de su imperio a menudo resultó en un ataque de insultos y descalificaciones muy duras, lo que provocaría una llamada a descargos en su oficina y, muy posiblemente, en ser despedido de inmediato.

Pero esto no pasaba solo dentro de su empresa. Sus ataques a quienes se oponían a él desde fuera de su imperio fueron aún más brutales.

Siendo muy hábil en los negocios, entendió el valor de controlar las patentes y usó el poder de los abogados de la RCA para aplastar los negocios y arruinar la vida de cualquiera que se interpusiera en el camino.

David Sarnoff, presidente de la RCA.

Edwin Howard Armstrong fue uno de esos personajes que tuvieron el genio y la audacia de desafiar a Sarnoff en un litigio de patentes, pero al final, pagó con su vida ese desafío.

En 1933, Armstrong, un amigo de Sarnoff desde 1914, ideó un nuevo esquema para la transmisión de radio llamado modulación de frecuencia o FM.

Este sistema, que entregaba una mejor calidad de audio que la modulación de amplitud, o AM, que era el sistema que utilizaban prácticamente todos los sistemas de transmisión de RCA, redujo drásticamente la estática y proporcionó un sonido mucho más claro.

Armstrong propuso cambiar el sistema de transmisión de RCA a FM, pero Sarnoff se opuso a esto enérgicamente. Entonces Armstrong dejó la RCA para iniciar su propia emisora de FM, y en 1948 demandó a RCA y NBC, alegando una conspiración para influir en la FCC para limitar el desarrollo de la radio FM.

La respuesta de Sarnoff fue demoledora: llamó a sus mejores abogados y apaleó a su antiguo amigo en los tribunales durante seis años. En enero de 1954, abatido y casi indigente, Armstrong se suicidó.

7. Se cree que las ondas de radio seguirán viajando para siempre a menos que algo las absorba.

Una onda de radio es simplemente una onda de radiación electromagnética, cuya partícula portadora es el fotón, también conocido como el «bosón de calibre» para la fuerza electromagnética.

Así como la luz de las estrellas distantes, compuesta de fotones, viaja miles de millones de años luz sin extinguirse, también lo hacen todas las demás radiaciones electromagnéticas, incluidas las ondas de radio, las microondas, los rayos gamma, los rayos X, etc.

Por ejemplo, la señal original de la transmisión que hizo desde Berlín en 1932 Edward R. Murrow durante la Segunda Guerra Mundial, todavía se encuentra viajando hacia el exterior del sistema solar, describiendo una esfera con un radio de 84 años luz, probablemente tan atenuada y llena de estática que es indistinguible del siseo de fondo que produce el sol.

Pero esos fotones originales todavía vuelan por ahí, en el espacio exterior, a menos, por supuesto, que hayan chocado con algo grande como la magnetosfera de Júpiter y hayan sido absorbidos o desviados. Sin embargo, esto es difícil, puesto que el espacio exterior es realmente amplio y es difícil que una onda electromagnética llegue a chocar con un planeta o una estrella.

Antenas del proyecto SETI.

Por esta razón es que existen proyectos para buscar señales de inteligencia extraterrestre, conocidos bajo las siglas SETI (Search of Extra Terrestrial Intelligence). El primer experimento SETI moderno fue el Proyecto Ozma del astrónomo estadounidense Frank Drake, que tuvo lugar en 1960.

Drake usó un radiotelescopio (esencialmente una antena grande) en un intento de descubrir señales de estrellas cercanas similares al Sol. En 1961, Drake propuso lo que ahora se conoce como la ecuación de Drake, que estima el número de planetas que podrían enviar transmisiones.

Debido a que muchos de estos términos son desconocidos, la ecuación de Drake es más útil para definir los problemas de detección de inteligencia extraterrestre que para predecir cuándo sucederá esto, si es que ocurre alguna vez.

Hasta ahora no se han encontrado señales extraterrestres confirmadas. Las primeras búsquedas, que no pudieron determinar rápidamente si una emisión era de origen terrestre o extraterrestre, con frecuencia encontraban posibles señales extraterrestres.

La más famosa de ellas fue la llamada señal «Wow», medida por un experimento SETI en la Universidad Estatal de Ohio en 1977. Las observaciones posteriores no lograron encontrar esta señal nuevamente, por lo que esa señal, así como otras detecciones similares, fueron desechadas.

La mayoría de los experimentos SETI no transmiten señales al espacio. Debido a que la distancia hasta una posible inteligencia extraterrestre cercana podría ser de cientos o miles de años luz, la comunicación bidireccional sería una utopía.

La señal emitida se demoraría años luz en llegarles a ellos y otros años luz en escuchar su respuesta.

Solo como referencia, un año luz equivale a la distancia que recorre la luz durante un año. Un fotón recorre unos 300 000 kilómetros en un segundo, o sea que viaja unos 9 460 800 000 000 de kilómetros en un año, es decir, 9,46 billones de kilómetros.

La galaxia más cercana a la tierra está a unos 42 000 años luz.

Por esta razón, los experimentos de SETI se enfocan en encontrar señales que podrían haber sido transmitidas deliberadamente o podrían ser el resultado de una emisión inadvertida de civilizaciones extraterrestres.

8. Un mensaje de texto enviado desde un teléfono celular es una onda de radio.

Ondas de radio similares a las de la radio se utilizan para la transmisión y recepción de los mensajes de texto o SMS (Short Message Service).

Los teléfonos móviles reciben señales de frecuencias específicas y, al mismo tiempo, envían sus propias ondas de radio a la red. En este caso, la red se refiere a un sistema que consta de tres torres, una antena y un transmisor.

Esta red divide el área geográfica en subdivisiones, y a cada subdivisión se le llama «célula«. Por esta razón, a este tipo de comunicaciones se les llama ‘celulares’.

Esa célula que recibe la señal original del teléfono decide a cuál otra célula enviarla, buscando siempre el camino más corto. En caso de encontrar todas las células o celdas de una torre ocupadas, la señal puede ser enviada a una torre más lejana o, simplemente, no es posible ser entregada.

Torre con antenas de servicio celular.

En áreas densamente pobladas, el área cubierta por una torre de radio se superpone con la otra, así que hay más posibilidades de que la señal llegue siempre a su destino. Sin embargo, en el campo y en áreas remotas alejadas de las torres de radio, las condiciones de transmisión no serán las óptimas.

Cuando se transmite un SMS desde el teléfono móvil, la torre de radio cercana recibe la onda de radio transmitida y la convierte en un impulso electrónico. El impulso electrónico convertido se transmite a una estación base de la red llamada Mobile Switching Center (MSC).

El MSC identifica la torre de radio responsable del área a la que pertenece el teléfono móvil que recibe el SMS y transmite el impulso electrónico. Luego, la torre de radio convierte el impulso electrónico en una señal de radio, que es recibida por la antena del teléfono móvil y muestra el mensaje de SMS.

Lo sorprendente es que toda esta serie de eventos de transmisión y recepción se realiza en segundos.

Ahora, los mensajes enviados por las aplicaciones de mensajería como WhatsApp se envían a través de cables submarinos a todo el mundo, a diferencia de los SMS.

Actualmente se están desarrollando tecnologías para redes de teléfonos celulares y teléfonos inteligentes con la tecnología llamada de cuarta generación (4G) y más recientemente de quinta generación (5G).

Incluso, mientras la mayoría de los países del mundo todavía esperan el despliegue de las redes móviles de quinta generación, Corea del Sur anunció en enero de este año que tiene planes para lanzar la tecnología 6G en 2026.

Estas nuevas tecnologías aumentan la velocidad de comunicación unas 100 veces, y algunos creen que a partir de 2023 sea posible incorporar teléfonos móviles en el cuerpo, dando pie a la posibilidad de que se puedan enviar mensajes simplemente con el pensamiento, como una especie de telepatía.

9. Los radios para automóviles estuvieron a punto de ser prohibidos.

El primer radio de carro fue presentado en 1922 por Chevrolet. Su costo era de 200 dólares, unos 3.500 dólares de hoy. Su antena cubría todo el techo del automóvil, las baterías apenas cabían debajo del asiento delantero y sus dos altavoces gigantes estaban conectados detrás del asiento.

Era casi lo mismo que llevar una orquesta en vivo a dar un paseo.

Así lucía el primer radio de carro, con su antena en el techo y el parlante detrás del conductor.
(Foto: http://www.oldmagazinearticles.com/First_Car_Radio-pdf)

A principios de la década de 1930, los radios Motorola integrados al tablero, menos voluminosos, se volvieron un elemento estándar para los carros. A pesar de ello, ese mismo año se propusieron leyes en Massachusetts y St. Louis para prohibir los radios en los autos mientras se conducía.

Según el historiador automotriz Michael Lamm, «los opositores a las radios de los automóviles argumentaron que distraían a los conductores y causaban accidentes, que sintonizarlas desviaba la atención del conductor de la carretera y que la música podía arrullar a un conductor para que se durmiera».

Incluso el Auto Club de Nueva York estuvo de acuerdo. En su encuesta de 1934, el 56 por ciento consideró que el radio del automóvil era una «distracción peligrosa».

Por su parte, y como respuesta a estas acusaciones, la Asociación de Fabricantes de Radios señaló que los radios de los automóviles, por el contrario, podrían usarse para advertir a los conductores sobre las inclemencias del tiempo y las malas condiciones de la carretera, así como para mantenerlos despiertos.

De hecho, en esa década de los años 30, la sintonización con botones y las presintonías ayudaron a los conductores a seleccionar estaciones sin apartar la vista de la carretera.

Para 1946, 9 millones de autos tenían radios. Gracias al transistor, tanto el tamaño como el precio se redujeron, de modo que, en 1963, 50 millones de automóviles, más del 60 por ciento, estaban equipados con radios. Para entonces, más de un tercio de la audiencia de radio en Estados Unidos se producía en el automóvil.

Aunque algunas de esas leyes en contra de la radio en los carros se firmaron en pequeños municipios, en su mayoría no prosperaron, y hoy en día se comparan a las leyes que prohíben el uso de teléfonos celulares mientras se conduce, especialmente contra aquellos que chatean, envían mensajes de texto e incluso navegan por internet o miran sus redes sociales.

10. El rock, siempre atado a la radio

Aunque en la radio es posible escuchar todo tipo de géneros musicales, su relación con el rock ha existido prácticamente desde sus inicios. Muchos historiadores coinciden en afirmar que la primera canción de rocanrol estaba dedicada a un carro.

El Oldsmobile modelo Rockt 88 Convertible que inspiró la canción.

Su letra decía:

Déjame presentarte mi Rocket ’88

Sí, es genial, simplemente no esperaré.

A todo el mundo le gusta mi Rocket ’88

Cariño, rodaremos con estilo moviéndonos todo el tiempo

Motor V-8 y este moderno diseño

Techo convertible negro y a las chicas no les importa

Salir a rodar conmigo, paseando con alegría por toda la ciudad

Toca tu bocina, cohete, toca tu bocina

La canción se llamaba “Rocket ‘88”, interpretada por Jackie Brenston & His Delta Cats, y fue lanzada en abril de 1951.

Pero no ha sido la única canción que guarda relación con la radio y la música rock. De hecho, la NASA tiene una estación de radio, y lo único que ponen es rock alternativo.

Por otro lado, poco después de los ataques terroristas del 11 de septiembre en Nueva York, todas las emisoras de radio de la cadena Clear Channel -hoy iHeart Radio- recibieron un memorando con una lista de canciones que consideraban líricamente inapropiadas. La lista contenía 165 canciones sugeridas.

Era comprensible que, ante la sensibilidad del público, se sugiriera no tocar algunas canciones con letras y títulos agresivos. Por ejemplo:

  • AC/DC – Shot Down in Flames (Derribado en llamas)
  • AC/DC – Highway to Hell (Autopista al infierno)
  • AC/DC – Hell’s Bells (Las campanas del infierno)
  • Beastie Boys – Sabotage
  • Black Sabbath – War Pigs (Cerdos de Guerra)
  • Metallica – Seek and Destroy (Busca y destruye)

Sin embargo, más de 20 años después de ese acontecimiento, otras canciones se ven realmente ridículas en esa lista, por ejemplo:

  • Bangles – Walk Like an Egyptian (Camina como un egipcio)
  • The Beatles – Lucy in the Sky with Diamonds (Lucy en el Cielo con diamantes)
  • The Beatles – Obla Di, Obla Da
  • Carole King – I Feel the Earth Move (Siento la tierra moverse)
  • Cat Stevens – Peace Train (Tren de paz)
  • Elton John – Benny & The Jets
  • Elton John – Daniel
  • Elton John – Rocket Man (Astronauta)
  • Frank Sinatra – New York, New York
  • John Lennon – Imagine
  • Kansas – Dust in the Wind (Polvo en el viento)
  • Led Zeppelin – Stairway to Heaven (Escalera al Cielo)
  • Louis Armstrong – What A Wonderful World (Qué mundo tan maravilloso)
  • Nina – 99 Luft Balloons/99 Red Balloons (99 globos rojos)
  • Phil Collins – In the Air Tonight (En el aire esta noche)
  • Van Halen – Jump (Salta)

(La lista completa se puede ver dando clic aquí)

Por su parte, Robert Plant, el cantante principal de Led Zeppelin, una vez ofreció diez mil dólares estadounidenses a KBOO, que era una estación de radio comunitaria sin fines de lucro en Portland, Oregón, como incentivo para no volver a tocar nunca más la canción “Stairway to Heaven”.

La emisora, financiada por sus oyentes en Portland, fue escuchada en su carro por Plant cuando conducía su auto por Lincoln City. Al parecer, se enamoró de la emisora gracias a las eclécticas mezclas de música alternativa que estaba tocando.

“KBOO tenía una música increíble”, dijo el ex cantante de Led Zeppelin a NPR en 2002. “Era una especie de mezcla de canciones tristes de doo-wop y un DJ muy divertido, que sonaba como alguien del condado de Marin en 1967. Pensé, ‘esto es genial. Tengo que detenerme y escucharlo’”.

“El tipo dijo que estaban buscando patrocinios”, agregó Plant. “El típico comentario que dice, ‘Por favor envíe 10 dólares’ (o 15, o lo que sea), para que KBOO no volver a tocar ‘Stairway to Heaven’, así que lo llamé y le prometí mi dinero. Fui uno de los patrocinadores de KBOO”.

Conclusión

El mundo de la radio ha tenido muchos momentos memorables, algunos contribuyendo al progreso y a la hermandad de los pueblos del mundo y otras veces menos impactantes, como los ejemplos aquí expuestos, pero que no dejan de ser curiosos, llamativos y hasta divertidos.

Si quiere conocer más curiosidades de la radio, lo invito a leer estos dos artículos publicados por mí hace unos meses:

COMPARTIR

Agrega un comentario

Please enter your comment!
Please enter your name here